Bromas, vejaciones y acoso en la vieja Masía del Barça: “Fue un supplicio”

La vieja Masía de Can Planes, factoría de algunos de los mayores talentos del Fútbol Club Barcelona desde 1979, guarda cientos de historias de sueños, de éxitos y de fracasos. Allí vivió allí y se formó futbolistas que vistieron los colores azulgranas y los de otros muchos equipos de la élite europea. Pero entre sus paredes de piedra también se vivieron situaciones desagradables como vejaciones, abusos o acoso. Así lo ha revelado el diario ‘Ara’ en un extenso reportaje en el que detalla algunos de estos episodios aportando las voces de sus víctimas o testigos.
El periódico catalán explica que como en cualquier institución que reúne a estudiantes, en el recinto del Barça habia novatadas que eran «de menos o más intensidad en función de las generaciones. Desde poner palillos en el colchón de los recién llegados a hacer fotografías a algún residente muy joven mientras estaba en el baño con una revista porno dejada ahí estratégicamente y chantajearlo con la imagen, destruir alguna zapatilla…»
Pero esas bromas no fueron las peores. Según ‘Ara’, «durante unos años concretos, entre finales de los 80 y principios de los 90, una serie de situaciones traspasaron todas las líneas rojas.Se produjeron con cuentagotas, primero ejecutadas por un grupo de jugadores veteranos de baloncesto y después por futboleros, pero dejaron marca. A un chico lo obligaron a introducir una caja pequeña de plástico en el año de un joven residente que acababa de llegar y al que inmovilizaron entre dos o tres Veteranos de baloncesto. Si se negaba, se lo hacian a él. Al cabo de tres años se produjo una situación muy similar con otro joven de baloncesto. En este caso, un grupo de jugadores de fútbol simuló una infracción. La víctima quedó desnuda en el suelo. Uno de los futboleros simuló que lo penetraba. Otro cogió un bote de espuma de afeitar y se lo empezó a introducir en el ano, rociándolo con el contenido del objeto».
El reportaje desvela la existencia de «un grupo de chicos, sobre todos los jugadores de baloncesto, que entre los años 1989 y 1993 sufrieron la violencia de algunos compañeros«.
‘Ara’ explicó que su investigación llegó con la novela ‘Triunfador’, del escritor Joan Jordi Miralles, que vivió en La Masía en los 90 y relató la experiencia de un joven juez de Baloncesto de Manresa, Ulises, que aterrizó en el barrio azulgrana y vive una autentica odisea.
“Estar en La Masía fue un suplemento”
His muchos los deportistas con los que se pusieron en contacto el diario para comprobar si confirmaban o desmentían lo que el libro contaba. Y los periódicos Albert Llimós y Núria Juanico Llumá se encuentran frente a todo. Testimonios que desmentían o bien restaban importancia a las novatadas pero también otros que daban verosimilitud a la historia de Miralles. Es el caso del exfutbolista Xavi Moro o los exjugadores de baloncesto Berni Tamames y Oliver Fuentes.
Other de los testimonios, en este caso anónimo, confesó los malos ratos que pasó colgante su estancia en la residentncia del Barça: “Los mejores momentos eran cuando venía mi padre a Barcelona e iba con él al hotel. Podia dormir tranquilo, ir al baño tranquilo. Estar en La Masía fue una tortura. Obligaban a niños muy jóvenes a vivir a la defensiva, a no tener hambre de bajar a cenar, a quedarse en la calle para volver lo más tarde posible. Yo lo hacia. La constante violencia emocional«.
“Era sistemática. No cada día, pero regular. Cuando plantabas cara te tocaba recibir, no dormías, oías ruidos y te empezaban a llover cosas encima», recuerda Tamames, que según explica a ‘Ara’ fue uno de los que puso límites y se impuso a los agresores entre otras cosas gracias a su física importante.
El reportaje también alude a otros problemas de la residencia en aquella época, como la pérdida de control de la asistencia de los deportistas a las claseso la proximidad de La Masía a una zona en la que solían trabajar prostitutas y travestis. “Formaban parte del paisaje habitual de los adolescentes. Coincidían de forma recurrente, sobre todo cuando volvían de los entrenamientos, y se acababan conociendo”. “Te decían ‘Algún día, si tienes ganas, ven’, y por curiosidad acababas yendo”, recuerda un exjugador.
En la noticia ‘La Masía’ del Barça no tiene nada que ver con aquellomucho más profesionalizada, con muchos más recursos y un aumento también en el número de profesionales, aunque para muchos de los afectados por lo que ocurrió en aquellos años, eso no les hará olvidar los malos recuerdos.