Como Francia, Bélgica gana la capitanía de la selección

Así, la vuelta del fútbol de selecciones que tiene lugar estos días está dejando caras nuevas, equipos renovados y también mucha polémica. El mayor se da en Francia, cuando Didier Deschamps elige a Kylian Mbappé como primer capitán de Antoine Griezmann, con muchas más internacionalidades que el parisino. Una decisión que no ha sido comprisida por todos, empezando por el futbolista del Atlético de Madrid que, según medios locales, no estaría muy contento de haber quedado relegado al papel de segundo capitán.

De Bruyne ante Courtois

Sin embargo, aunque es el más llamativo por la relevancia del equipo, subcampeón vigente y uno de los más potentes del mundo, el galo no es el único caso. El debate sobre la capitanía también está al rojo vivo entre sus vecinos belgas, donde Kevin de Bruyne ha sido el elegante heredero de Eden Hazard, autor de Romelu Lukaku y Thibaut Courtois.

Domenico Tedesco, el técnico que relevó a Roberto Martínez en el banquillo de Bélgica, ha decidido por el centrocampista por su importancia en el juego del equipo. El del Manchester City ha sido, de facto, el líder de los belgas en los últimos campeonatos ante las ausencias y el bajo estado de forma de Hazard, así que bien esperando ese criterio la elección también podría podría ser el portero del Real Madrid.

“Estoy muy orgulloso de ser el capitán de nuestro país. Llevo mucho tiempo jugando con este equipo y espero poder hacer un buen trabajo para Bélgica”, confirmó De Bruyne, que no partía como favorito. Según la prensa belga era Romelu Lukaku, de 29 años, el que tenía más papeletas.

Tampoco tuvo suerte Courtois, que no goza de una gran relación con De Bruyne, y que pese a su magnífico estado de forma en las últimas temporadas se ha visto lastrado por su particular posición, alejado del resto de jugadores del terreno de juego, y por su fuerte caracter.