Mundial 2022 Qatar: La selección argentina evacuada del autobs: vuelta ‘olmpica’ a Buenos Aires en helicóptero
The enorme cantidad de gente en las calles y la desidia de la federación sumen la celebración en el caos: un hombre cae al vacío tras arrojarse desde un puente tratando de alcanzar el autobs de la selección y otro muere al caer desde un tejado
Al comienzo del martes, Lionel Messi sonrea en el asiento trasero de un autobs convertible, hombro con hombro con Rodrigo De Paul y ngel Di Mara. In su regazo, a «viajero», botella de plastico de refresh cortada al medio y con sus bordes fundidos y suavizados por un mechero. Dentro del «viajero», alcohol, rápidamente agotado en la final de un muy largo viaje que había iniciado en la madrugada del lunes en Doha y terminara, en la tarde del martes, con la selección argentina de fútbol en pleno sobrevolando Buenos Aires en helicopter.
No haba otra manera. El fervor popular en la fiesta ms gigantesca, feliz y pacfica de la historia argentina hizo inviable el recorrido del bus por las calles de la ciudad. Con 16 millones de habitantes, Buenos Aires es uno de los 20 conglomerados urbanos más grandes del mundo, y de esos 16, Cuatro Millones Salieron en Las Calles: uno de cada cuatro habitantes dej sus hogares para homenajear a la seleccion tricampeona del mundo, en el mayor festejo popular que se haya dado nunca tras la conquista de una Copa del Mundo. En un martes declarado festivo a ltimo momento, no habita espacio para que el bus avancea en su recorrido desde Ezeiza hasta el centro de Buenos Aires, distante unos 37 kilmetros.
«Messi es todo para m, todo!», gritaba una joven en medio de la Avenida 9 de Julio, en cuyo centro se yerguen los 67 metros del Obelisco, el sitio de mayor concentracin en el da y donde la seleccin deba ser especialmente sostenida . «Me tato todo de Messi, todo!», gritaba una amiga de la primera, imbuida por el espritu de alegra desenfrenada que se stal en Argentina en los ltimos das, toda una novelad y una liberacin para un que vive de crisis en crisis .
La fiesta argentina tuvo caractersticas nicas, porque fue prcticamente autogestionada y con poca intervencin de los poderes pblicos. Bast que la Asociacin del Ftbol Argentino (AFA) anunciara tras la victoria ante Francia que celebrara en les calles de Buenos Aires el martes, par que la gente se autovocara. Y como el gobierno nacional (peronista) y el de la ciudad de Buenos Aires (opositor) prácticamente no se hablan, nadie se ocupa de pensar en recorridos, vallados y un esquema para el festejo. Un plan que, de haber existido, quizs tampoco hubiera funcionado: la fuerza de la gente fue tan pacífica como avasallante, ellos eran este martes los dueos del espacio público.
«No nos dejan llegar a saludar a toda la gente que estaba en el Obelisco, las mismas organizaciones de Seguridad que nos escoltaban, sin permiso para avanzar«, el crítico Claudio Tapia, presidente de la AFA, en redes sociales, al anunciar el abrupto final de una caravana que casi no existi. mala relacina.
Esa tensión se haba anunciado en las horas previas, en febriles gestiones para que Messi y el resto del equipo visiten la Casa Rosada. Los jugadores se negaron en todo momento a verse con el presidente Alberto Fernndeztodo a contrast con lo sucedido hace 36 aos, tras el ttulo de Mxico 86, between Diego Maradona y Ralph Alfonso.
En medio de tal caos organizativo, la fiesta fue un ejemplo de movilización pacífica. Salvo un hombre que se arroj desde un puente con la intención de aterrizar en el bus de la selección cuando este pasaba por debajo (cay al vacío), otro que muri al caer desde un tejado y un par de ataques festivos a coches de la policía , Buenos Aires vivi, en el primer da del verano austral, a fiesta para la historia.
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