para Volodymyr Zelensky, los rusos «ya han perdido esta guerra en sus mentes»

El anuncio del hallazgo de los restos de un misil «probablemente ruso» en el corazón de Polonia provocó una tormenta política en Varsovia, con la oposición protestando y exigiendo la dimisión del Ministro de Defensa, que pretende hacer de su país una potencia militar europea.

El primer ministro Mateusz Morawiecki dijo que solo se enteró del asunto a fines de abril, aunque el jefe del Estado Mayor de la Defensa, general Rajmund Andrzejczak, afirmó haber informado a los responsables. «en el momento de los hechos».

El viernes, la Oficina de Seguridad Nacional (BBN) adjunta al presidente polaco Andrzej Duda, quien según la Constitución es el comandante supremo de las fuerzas armadas, destacó que la información que tiene sobre el incidente “no justificaría decisiones personales dentro del mando de las fuerzas armadas”. Según BBN, “No se presentó ninguna conclusión al presidente”en ese caso.

Sin pronunciarse sobre los cargos que se le solicitan, el comandante de las fuerzas operativas, general Tomasz Piotrowski, llamó el viernes a » la razón «A «pesando las emociones»diciendo hacer » confianza « a los tribunales polacos.

El líder de la oposición centrista polaca, Donald Tusk, reveló que «la primera decisión» tomar la de despedir al Ministro de Defensa, Mariusz Blaszczak, quien, según él, está tratando de «esconderse detrás de los generales». El ex ministro de Defensa centrista Tomasz Siemoniak, por su parte, llamó «propaganda» la promesa repetidamente hecha por el actual titular de este cargo de que Polonia tendrá dentro de dos años «el ejército más poderoso de Europa». «El rey está desnudo»concluyó el Sr. Siemoniak frente a la prensa.

Por su parte, la izquierda ha denunciado » la mentira « Y «manipulaciones» fuerza.

Según los medios polacos, el misil, en el que se podían distinguir inscripciones en cirílico, no tenía cabeza armada, algo que ninguna fuente oficial ha confirmado hasta la fecha.