marzo 29, 2024

Tras la quiebra de Silicon Valley Bank, el espectro de una nueva crisis financiera

Una pérdida de tiempo: ni los esfuerzos y los miles de millones desplegados en la emergencia durante el fin de semana en Estados Unidos ni las declaraciones de los líderes políticos a ambos lados del Atlántico fueron suficientes para apaciguar a las bolsas mundiales, este lunes 13 de marzo, como si Los inversores estaban corrigiendo la conciencia de las amenazas que podrían justificar una nueva gran crisis financiera.

Garantizando la totalidad de los depósitos de Silicon Valley Bank (SVB), quebrado tras un movimiento masivo de retiradas de sus clientes, y los de Signature Bank, puesto bajo tutela, al tiempo que moviliza 25.000 millones de dólares (23.300 millones de euros) para hacer frente a las posibles necesidades de otros establecimientos, la Reserva Federal estadounidense (Fed, banco central), el Tesoro y la Federal Deposit Insurance Corporation buscaron evitar lo peor: un contagio rápido y descontrolado al resto del sistema financiero, comenzando por los bancos regionales, considerados más frágil

Los líderes políticos tomaron el relevo el lunes, con el presidente Joe Biden asegurando que los estadounidenses pueden tener confianza en sus bancos, mientras que los ministros de finanzas de la eurozona, reunidos en Bruselas, se turnaron frente a los micrófonos para tratar de tranquilizar a particulares, empresas e inversores.

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“No vemos ningún riesgo de contagio para Francia “, insistió el ministro francés, Bruno Le Maire, instalado ante la diversificación de la banca tricolor, que, según él, la «proteger»y un sistema de vigilancia » sólido «.

El recuerdo de la gran crisis financiera de 2008

Nada funcionó: al cierre, la Bolsa de París perdió un 2,9%, la de Fráncfort un 3,04% y la de Londres un 2,58%. Las acciones bancarias europeas, que ya habían sufrido el viernes 10 de marzo, amplificaron su caída: BNP Paribas perdió un 6,8%, Société Générale un 6,2%, Credit Suisse un 9,6% y Commerzbank un 9,9%. En dos sesiones, el índice de referencia de los bancos europeos cotizados cayó un 10,2%.

La jornada acabó mejor en Wall Street, con una respuesta limitada al 0,2% del índice S&P 500, pero el compartimento bancario aún perdió casi un 11% y la caída de la cotización del First Republic Bank, juzgado a su vez vulnerable, alcanzó hasta 79% en sesión.

Huyendo del riesgo en bolsa, muchos inversores se han refugiado en los mercados de bonos del Estado, señalados como más seguros, provocando fuertes caídas de sus rendimientos, que se mueven en sentido contrario a los precios: el de la deuda alemana a dos años, referencia para la zona euro, una caída de casi medio punto porcentual en la jornada.

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